Las enfermedades respiratorias son las que más padecen los jaliscienses. El especialista Román Pinto nos comparte recomendaciones para sobrellevar esta enfermedad y nos recomienda no dejar de lado las lecciones que dejó la pandemia.
Nuestro Instituto presentó el análisis Enfermedades de Jalisco en 2021 en el que se habló sobre las 20 principales enfermedades de la población del estado durante ese año, de acuerdo con los Anuarios de Morbilidad 1984-2021, de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud.
De acuerdo con este análisis, los principales padecimientos entre la población jalisciense fueron las enfermedades respiratorias agudas, con 563 mil 316 casos; seguido de las infecciones de vías urinarias con 147 mil 493, las infecciones intestinales por otros organismos y las mal definidas con 144 mil 191 y el COVID-19 con 111 mil 045 registros. Por su parte, se presentaron 11 mil 462 casos de neumonías y bronconeumonías y 10 mil 960 de asma.
Las enfermedades respiratorias agudas son las que atacan oídos, nariz, tráquea, garganta hasta los pulmones, y son ocasionadas en su mayoría por virus, aunque también pueden ser bacterias o parásitos, que se transmiten de persona a persona a través de las gotitas de saliva que expulsamos al toser o estornudar. También puede ser por contacto con superficies contaminadas como son manijas de las puertas, barandales de transporte público, mesas o escritorio, entre otros.
El investigador Luis Miguel Román Pintos, médico internista con especialidad en farmacología, explica para Strategos que las infecciones de las vías respiratorias altas son las que se generan de la tráquea hacia arriba y afectan a la nariz, senos paranasales, faringe y laringe. “Las bajas, son las que se generan de los bronquios hacia abajo, y que afectan los bronquios y pulmones”.
La principal causa de que nos enfermemos de las vías respiratorias es por la fácil transmisión de las bacterias y virus que adquirimos en la convivencia con otras personas. “No podemos evitar estar en contacto con nuestros congéneres y por ello es más fácil enfermarse”.
Medidas de protección
En la pandemia, los padecimientos en las vías respiratorias disminuyeron drásticamente debido a los cuidados utilizados para evitar los contagios como fue el uso del cubrebocas, del gel antibacterial, la sana distancia y el lavado de manos.
De acuerdo con Enfermedades de Jalisco en 2021, entre 2016 y 2021 se registró en Jalisco un decremento del 60.1%, lo que significó 846 mil 827 menos casos. En el período 2020-2021 hubo un descenso del 19.9%, es decir, una reducción de 139 mil 648 casos.
Román Pintos, profesor investigador de la Universidad de Guadalajara, explica que “durante la pandemia prácticamente sólo se veía la enfermedad del COVID-19, pero no había registros de influenza o adenovirus porque la gente tomó conciencia de que los virus entran al organismo al convivir con otras personas, por ello, el aislamiento, la distancia, el uso del cubrebocas y utilizar las medidas de prevención como el lavado de manos, provocó que no hubiera tanto contagio de otro tipo de enfermedades respiratorias”.
Sin embargo, los seres humanos no podemos dejar de convivir y estas enfermedades seguirán existiendo y en ocasiones provocando la muerte. “Prácticamente 6% de los jaliscienses fallecieron durante la pandemia”, comenta Román.
El grado de afectación al paciente dependerá del germen involucrado y de la condición física de la persona. “No es lo mismo un paciente sano, saludable, de 18 a 30 años a una persona que fuma o que tiene diabetes, hipertensión o es mayor de 65 años con otros padecimientos.
Cualquier paciente con síntomas respiratorios debe utilizar el cubrebocas para evitar contagiar a los demás y acudir inmediatamente al médico desde el primer síntoma. “Buscar la cura en medicamentos no es una solución efectiva”, comenta Román.
“Esa solución sería como pensar que está bien tomar medicamentos toda la vida, y no es correcto, pues las infecciones respiratorias no son de una temporada, se presentan todo el año”.
Los más afectados
Durante 2021, las infecciones respiratorias agudas afectaron a 252 mil 560 (44.8%) hombres y a 310 mil 756 (55.2%) mujeres. Los grupos etarios más castigados fueron las y los adultos de 25 a 49 años, con un monto de 197 mil 214 registros; es decir, el 35.0% del total.
Le siguieron las niñas y niños de 1 a 14 años, con un 28.4% (159,777) y, los jóvenes de 15 a 24 años con el 15.3% (85,977). Por su parte, el 5.1% (28,915) fueron niñas y niños menores de un año, mientras que el 7.9% (44,674) fueron personas adultas mayores de 60 años y más.
Román Pintos, profesor e investigador del Centro Universitario de Tonalá de la Universidad de Guadalajara indica que las mujeres en las estadísticas aparecen en mayor número y esto se debe a que son ellas quienes más acuden al médico.
Además, las mujeres están más en contacto con sus hijos cuando ellos están enfermos. “Las mamás siempre están presentes cuando sus niños están enfermos, los alimentan, los arropan, los visten, los bañan y obviamente hay un mayor contagio desde la población infantil hacia las madres”.
El investigador Román Pinto explica que las enfermedades más comunes fuera del hospital son las gastrointestinales debido a la mala alimentación y a la mala higiene en los alimentos, pues muchas veces no son lavados, desinfectados o hervidos debidamente. Y al igual que las enfermedades respiratorias las manos son la vía de entrada.
Indica que la gente que padece de una infección gastrointestinal no va a consulta, ni al hospital y se automedican, por ello, en las estadísticas detectan estas infecciones como la tercera enfermedad que padecen los jaliscienses.
Mientras que las infecciones en las vías urinarias afectan más a los pacientes hospitalizados. “La mayor parte de las veces suceden por contagio del mismo personal, incluso se da por la contaminación de los instrumentos que se utilizan, entre ellas las sondas que, aunque estén esterilizadas las bacterias pueden caminar y contagiar la vejiga”
Las mujeres son más propensas a las infecciones de vías urinarias debido a que la vejiga está más en contacto con la uretra femenina (tubo a través del cual la orina pasa fuera del cuerpo) y por ello es más fácil que las bacterias ingresen al organismo. Mientras que el pene brinda mayor protección porque hay una mayor longitud de la uretra.
Román Pinto explica, además, que las alergias respiratorias son manifestaciones del aparato respiratorio ante la intolerancia de una sustancia determinada, como el polvo, el polen, o el pelo de ciertos animales. Las alergias provocan procesos de inflamación, mientras que las infecciones son a causa de bacterias y virus.
El especialista recomendó utilizar las medidas de higiene utilizadas en la pandemia y acudir al médico general cuando se perciban los primeros síntomas.