- Académicos, funcionarios públicos y sociedad civil analizaron el tema en 4 mesas de trabajo: Ruido Urbano; Ruido y Salud; Ruido Comunitario, y Ruido y Actividades Recreativas.
El Instituto de Información Estadística y Geográfica (IIEG) fue sede el viernes 4 de octubre del III Foro Social Universitario: Ruido Salud y Bienestar donde investigadores de la Universidad de Guadalajara, funcionarios públicos y sociedad civil se reunieron para actualizar el mapa de ruido de la Zona Metropolitana de Guadalajara y ofrecer aspectos críticos del tema para llevarlos a la agenda pública.
Augusto Valencia López, director del IIEG destacó que el ruido es considerado el segundo factor más perjudicial para la salud después de la contaminación del aire, según la Organización Mundial de la Salud.
Detalló que el ruido es considerado el principal motivo de conflicto y enfrentamientos entre las personas en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), según datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del segundo trimestre de 2019.
Por su parte, Martha Georgina Orozco Medina, investigadora del Instituto de Medio Ambiente y Comunidades Humanas del CUCBA explicó que los principales detonantes del ruido en la ZMG a son el tráfico vehicular; las actividades recreativas en bares, restaurantes, antros; el ruido de la construcción y por el vecindario y la comunidad.
Luego de la inauguración del foro y después de varias horas de trabajo, cada una de las 4 mesas de trabajo que fueron divididas en Ruido Urbano; Ruido y Salud; Ruido Comunitario y Ruido y Actividades Recreativas ofrecieron sus conclusiones.
Detallaron que las áreas comerciales; la obra privada y pública, el tráfico, así como el ruido en zona habitacional son focos constantes de ruido que generan estrés y pérdida de sueño; insomnio, afectación cardiovascular, hipertensión, disminución del umbral auditivo, problemas de comunicación, así como accidentes, ocasionados por disminución en la percepción auditiva. También genera conflictos sociales.
Propusieron políticas y programas integrales donde se prohíba el uso del claxon. La necesidad de socializar y concienciar a las autoridades para efectos de la observancia y cumplimiento normativo aplicable al conflicto de ruido.
Sumar esfuerzos y actores con el objeto de atender la problemática que genera el ruido. Concienciar al ciudadano respecto al deterioro de la salud y calidad de vida que produce el ruido a través de educación temprana y campañas en redes sociales.
Ve las conclusiones completas.