Se redujo 2.6% de la población en pobreza extrema, es decir un 44.6% (Información complementaria)
De acuerdo al informe presentado el día 23 de julio del año en curso, por parte del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) que hace a partir de los datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) del Módulo de Condiciones Socioeconómicas que captó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI); el Instituto de Información Estadística y Geográfica (IIEG) da a conocer datos relevantes de la información estadística con relación a los indicadores de pobreza donde Jalisco es la cuarta entidad en la que se redujo la pobreza entre 2012 y 2014, esta nueva estimación de pobreza para el año 2014 se suma a las mediciones realizadas en 2008, 2010 y 2012.
Los datos de la medición multidimensional de la pobreza, evalúan las carencias sociales de la población, en donde se considera además de los ingresos, seis posibles carencias de la población, ellas son: calidad y espacios de la vivienda, rezago educativo, acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, a la alimentación y carencia de los servicios básicos en la vivienda. De esta manera considerando los dos tipos de pobreza (extrema y moderada), se tiene que al 2014 en Jalisco, el 35.4 por ciento de la población vivía en condiciones de pobreza multidimensional, lo que significa que aproximadamente 2.78 millones de personas presentaban al menos una carencia social y no tenían un ingreso suficiente para satisfacer sus necesidades de alimentación, educación, salud, transporte, vivienda, etcétera y para el 2012 era de 3.05 millones (39.8%), es decir un 11.1 por ciento menos que los resultados recientes (2014).
En ese mismo año (2014) se registró que había en el estado 2.5 millones de habitantes, es decir, el 32.1% de la población que estaban en pobreza multidimensional moderada; ya que en 2012 era el 34.0% lo que en monto de población son 2.6 millones que son aquellas personas cuyos ingresos están por debajo de la línea de bienestar y tienen entre una y tres carencias sociales. En este periodo de tiempo disminuyó un 5.4% respecto al porcentaje de población en estos dos años.
Así mismo, entre 2012-2014, la población del estado que se encuentra en pobreza extrema se redujo de 446.2 mil de personas (5.8%) a 253.2 mil (3.2%); es decir 193 mil personas menos en estas condiciones, y con una reducción de 2.6 puntos porcentuales, que representan un cambio relativo del 44.6% en este periodo. Una característica más que son aquellas personas que presentan tres o más carencias sociales y su ingreso es insuficiente para cubrir sus necesidades de alimentación, aun si dedicaran todo su ingreso para ese fin.
Evolución de las carencias sociales y población con ingresos bajos 2012-2014
Uno de los factores más importantes que conforman las mediciones de la pobreza y la pobreza extrema son las carencias sociales. Entre 2012 y 2014 se observó una disminución en rezago educativo del 3.8% respecto al porcentaje y solo un 1.4% en número de las personas ya que en 2012 era del 18.4% y se redujo a 17.7%, es decir que el monto de población bajó 19 mil personas con esta carencia. (Ver figura 3).
En lo que se refiere a los indicadores de carencias sociales específicas, los datos de 2014 muestra que el 49.6% de los jaliscienses carecen de acceso a la seguridad social el cual se redujo un 7.3%, por otro lado un 19.1% carece de acceso a los servicios de salud; al acceso a la alimentación un 16.5 por ciento, en lo que se refiere a los servicios de vivienda, un 7.0% carece de acceso a los servicios básicos y un 6.6% muestra carencia por calidad y espacios en la vivienda. (Ver figura 3).
Debido a que la mayoría de las carencias sociales disminuyeron, también se redujo el porcentaje de la población que tiene al menos una carencia social al pasar de 68.1% a 65.0%, así como el porcentaje de la población que tiene tres carencias o más que pasó de 17.0% a 12.3% en estos dos años, lo que representa una reducción de 447 mil personas. Lo anterior contribuyó a reducir el número de carencias promedio de la pobreza y de la pobreza extrema.
Entidades Federativas
La medición de la pobreza en las entidades federativas incluye los mismos dos grandes rubros que la pobreza nacional: carencias sociales e ingreso y, de acuerdo con los datos, también es afectada por la dinámica poblacional.
En lo que respecta a la pobreza multidimensional, en 18 entidades federativas se observó una reducción posicionando a Jalisco entre los primeros lugares con una disminución del 11.11% entre 2012 y 2014, esto respecto a los 4.4 puntos porcentuales, antecediéndole entidades como Nayarit (14.95%), Durango (13.17%) y Nuevo León (12.39%); en el otro extremo entidades como Morelos, Veracruz y México fueron lo que más altos porcentajes tuvo de incremento en este rubro con 15.00% 10.18% y 9.41%, respectivamente ( Ver figura 4). A nivel nacional es importante mencionar que tuvo un incremento del 1.51%, lo que en puntos porcentuales significa un 0.7 en estos dos años.
El comportamiento de la pobreza extrema en las entidades federativas entre 2012 y 2014 muestra que Nuevo León y Jalisco son las entidades que presentaron los más altos porcentajes de cambio en este tiempo, al reducir 1.1 y 2.6 puntos porcentuales, respectivamente, lo que representa para la entidad del norte un 44.92% y nuestro estado el 44.64% respecto a 2012, en el otro extremo las entidades que incrementaron su proporción en este rubro es Chihuahua con 1.7 puntos porcentuales y que representa el 44.19% y Morelos con el 24.35% (ver figura 5) .
Las cifras de pobreza que reporta el CONEVAL de manera sistemática a nivel nacional y por entidad federativa tienen como objetivo mejorar la política pública de todos los órdenes de gobierno. Esta información nos indica que si bien ha habido avances en reducción de diversas carencias sociales a nivel nacional y en diversas entidades federativas, los retos más importantes son incrementar el ingreso de las familias, así como mejorar la calidad en los servicios otorgados a la población en pobreza. Un tercer reto radica en reducir de manera sostenida las aún persistentes brechas de pobreza entre entidades federativas.